Recuerdos

Aún recuerdo el 27 de Julio como si fuera ayer, cuando te pedía salir conmigo. Fue un mes intenso y muy pasional, de esos en los que las horas pasan volando y anochece antes de lo normal. Cuando la brisa golpeaba nuestras caras felices y éramos felices, tal y como siempre habíamos esperado. Después de contarnos hasta nuestros peores días y de como nos enfrentábamos día a día a la realidad, una realidad que por muy dura que fuera, dejaba de serlo cuando estábamos juntas. Me da una rabia inmensa de verdad, estoy como en un punto en el que ni yo misma encuentro motivos por los que hoy por hoy no compartimos nuestra vida. Porque no estamos en un autobús partiendo hacia nuestro paraíso, porque no estamos contando los minutos, los segundos, las décimas para que nadie ni nada interrumpa nuestro paso a la felicidad eterna. Hoy recuerdo tus palabras en mi oído, hoy recuerdo tus frases y tus gestos, hoy recuerdo hasta tus enfados y tu peculiar manera de que se te note todo en la cara, hoy recuerdo tu película favorita, como la recuerdo los trescientos SESENTA Y CINCO días del año, tu color favorito y hasta tu comida favorita. Hoy quiero escribir por qué recuerdo, recuerdo porque cuando voy a ponerme algo negro me acuerdo de ti, recuerdo porque cuando voy a comerme una ensaladilla rusa me acuerdo de ti, recuerdo porque cuando veo el principito me acuerdo de ti, recuerdo porque veo cualquier cosa de Albert Espinosa y me acuerdo de ti, recuerdo cada 27 de cada mes como si fuera el más importante, recuerdo porque he decidido no dejar de recordar que te quiero como recuerdo tu cara cada día.