¿Fueron felices?

Despiertas en mi ser dos sentimientos, el sentimiento del odio y el sentimiento del amor. Te odio cuando te imagino en brazos de otra persona, te odio cuando me olvidas y tus sentimientos se van apagando, te odio por no llegar a odiarte de verdad, te odio tanto que me encantaría que me odiaras para no olvidarme nunca. Te quiero por la felicidad que construías a mi alrededor, te quiero por todo lo que te quise, te quiero y sé que te querré, aunque te empeñes en decir que encontraré otra persona, te quiero porque hay mañanas que me levanto pensando que hoy te veré, te quiero porque tengo la sensación de que esto no ha acabado, te quiero porque eres perfecta y diferente, te quiero porque fuiste la primera persona en decírmelo a la cara, te quiero por todas las emociones que me has echo sentir, te quiero porque me es imposible dejar de hacerlo, te quiero porque no quiero querer a nadie más, te quiero porque me recorre un sentimiento de fuerza bastante grande, te quiero porque quererte me parece lo más bonito del mundo. Pero aunque te odie y te quiera, solo sé que quiero decirte a la cara que te odio y te quiero porque tú Alejandra, has echo de mí un ser vulnerable que lo único que busca es cobijo para amarte y respetarte hasta que la muerte nos separe.

Arrepentimiento.

Aún me arrepiento de haberte dejado escapar, es una sensación de vacío inmensa; no es la primera vez que convivo con esta soledad interna, con esta angustia... Te necesito, es algo que tengo claro, necesito tus caricias, tus sonrisas, tus gestos, necesito todo de ti, suena egoísta, es más soy una egoísta, pero estoy tan profundamente enamorada de ti que se me olvida lo injusta que he sido, aunque te juro por mi vida entera que he luchado, que he dado todo de mí, pero el miedo ha podido conmigo. Hubiera roto barreras,muros,puertas... pero de verdad que por muy a escusa que suene, no te merezco, he decidido este error como tantos en mi vida,la soledad es mi aliada y ahora sé que la tengo miedo, la tengo tanto miedo porque tu no estás. Me siento tan mal, no tengo ganas de nada, todo me recuerda a ti y las noches son horribles y eternas. Odias que te pidan perdón, pero yo lo hago, pido perdón por mi ausencia en tus momentos malos, no son palabras, simplemente es la verdad, tú que has estado, que has luchado por levantar un mundo a mi lado y yo, tan estúpida de no aceptar que la felicidad existía si tu compartías tus días conmigo. Correría a tu lado, lucharía, pero me doy vergüenza, no me merezco nada de ti, no dejaré que sufras una vez más, aceptaré que rehagas tu vida, pero por favor no me muestres la felicidad que podrías haber tenido conmigo. Joder, te quiero tanto...